Nada mejor que la castidad forzada para escenificar y simbolizar la dominación femenina. Unos genitales masculinos atrapados en su prisión de metal, plástico o cuero y un pene al que se le impide la erección son dos perfectos ejemplos de cómo una mujer dominante puede esclavizar el pene de su sumiso y ejercer su dominio sobre él. El erotismo de Egon Schiele, que debió enfrentarse a la censura ya hace más de un siglo, prosigue batallando con ella en estos tiempos en los que parece que una cierta moralina pretende limitar la expresión pública de ciertas formas de erotismo. Por lo menos eso es lo que ha sucedido en G. Bretaña y en Alemania, donde carteles con obras de Egon Schiele han sido censurados. En los dos casos no se ha considerado adecuado y sí turbadora la exhibición pública de genitales que caracteriza ciertas obras de Schiele. Esas obras, expuestas en carteles que servían para festejar los cien años del modernismo vienés y publicitar las exposiciones que se celebrarán durante este año en Viena, presentaban una banda impresa que, mientras que tapaba los polémicos y turbadores genitales, proclamaba Lo siento, 100 años mas demasiado audaz para hoy.
Alba es una preciosa joven de España cuya belleza y dulzura te van a dejar fascinado
El Kama Sutra no es sólo un artículo de posturas. El Kama Sutra es algo más. Es una guía para llevar una vida agradable y muy elegante, una recolección de recomendaciones que no sólo tratan de las relaciones íntimas, también lo hacen, por ejemplo, de la obtención de pareja y del comportamiento de ésta, una especie de colección y reescritura de escritos anteriores, costumbres milenarias y sabiduría popular. Todos sabemos que Brad Pitt estuvo casado con Jennifer Aniston, luego se divorcio y se caso con Angelina Jolie, cualquiera hubiera creído que con está última sería para toda la vida, no fue así…… Recuerda que te llevas a donde desee que vayas.
Agarre en torno a la base ( inferior) del eje del pene con el pulgar y el índice de una mano. Esto retiene la sangre en el pene. Con la otra mano, agarre todo el camino alrededor del pene, haga una señal de OK con el dedo índice y el pulgar, y agarre de manera firme. Hernán Migoya, en una entrevista concedida a María Palmero, de El Confidencial, ha dicho del ‘cuarentón hijoputa’ que es un personaje muy generoso, porque te deja conjuntar todas y cada una de las tonterías que se te ocurren en la vida real y no podrías meterlas en una serie o bien película. Migoya asevera que el ‘cuarentón hijoputa’ es un personaje absurdo pero que funciona, una suerte de muñeco deformable. El propósito de todos los relatos presentes en Proeza erótica del cuarentón hijoputa es reflejar el vacío que hay detrás de toda exploración sexual. En tiempos en los que se demoniza al sexo y en que se vuelve a vivir un cierto entorno regresivo que devuelven a la sociedad a temporadas pasadas, Hazaña erótica del cuarentón hijoputa procura exaltar el sexo libre de culpa.
Ejercen además un influjo poderoso sobre la mayor parte de las mujeres y nos ofrecen posibilidades infinitas de proyectar Valor, crear conexiones, provocar Estados Convenientes, elevar la Temperatura de Adquiere y hallar formas y pretextos de pasar de Nivel. Como progenitores, educadores y instructores, debemos llamar la atención a los chicos e imponer consecuencias por el empleo de cualquier género de lenguaje desconsiderado. Michael Kimmel, autor de Guyland: The Perilous World Where Boys Become Men, describe la manera en que los chicos se fuerzan unos a otros a pasar inadvertidos: Nuestros coetáneos son una suerte de policía de género, siempre aguardando que metamos la pata para poder ponernos una multa por traspasar los límites bien definidos de la hombría. De jóvenes, nos convertimos en vaqueros inexorables, que resguardan las vallas, controlan la línea fronteriza entre la masculinidad y la feminidad, se aseguran de que nada se traspasa al otro lado. Las posibilidades de ser desenmascarados están en todas s.10
No cerremos la puerta a estas posibilidades si queremos ligar cuando somos cincuentones
No sabía que en su afectividad seguían estando todas las imágenes con Juliana, tanto buenas como malas. Como el poso que hay en el fondo de un depósito de agua cristalina, por poco que se remueva, el agua se enturbia y, si hay poca, toda se contamina. A mí de pequeña no me agradaba leer. Fue a los 25 años cuando empecé a oír conferencias de crecimiento personal y profesional y a partir de entonces compré artículos de estos temas. En la Universidad leía artículos por mi cuenta sólo de las asignaturas que más me gustaban. Hoy te puedo decir que todo tiene su encanto y precisamos despertar el interés por aprender de cualquier cosa, pues eso desarrolla nuestra inventiva.
¿Qué buscamos en una pareja? ¿Qué procuramos localizar en esa persona a la que intentamos conquistar? ¿La expresión media naranja una parte de una realidad? ¿Es cierto que en el otro buscamos a quien nos ayude a completarnos y a permitirnos lograr nuestra forma perfecta? La contestación a esta pregunta puede ser muy diversa. Los teóricos de la antropología, la sociología o la psicología han dado respuestas, en ocasiones próximas, en otras completamente opuestas entre ellas.
Y es haciendo el amor de esta forma, utilizando la polaridad, como se inicia el proceso de establecer un potente campo de energía no solo entre los 2 cuerpos, sino más bien asimismo dentro de ellos. La bioelectricidad que emana de este campo imantado prosigue un camino en espiral, lo que explica por qué razón el movimiento del afamado poder serpenteante, la energía kundalini1 localizada en la base de la espina dorsal masculina, se experimenta como si se tratara de una serpiente que nos diese sensaciones fuertes, extensas y paroxismales. Como complemento a esto, la raíz de la energía kundalini femenina no está en la base de la espina dorsal, como equivocadamente se creta, sino más bien en los senos. Y debe ser de esta forma por el hecho de que la energía no puede ser generada en un centro negativo. Cuando los senos y el corazón de la mujer alcancen un pleno estado de resonancia, la víbora de la que hemos hablado se desenroscará grácilmente y va a dejar un camino abierto. Toda vez que la energía se conecta y vibra de forma profunda en los cuerpos y de las almas, el acto de hacer el amor puede elevarse mediante las bioelectricidades hasta cotas jamás alcanzadas anteriormente. Cuando la electricidad del cuerpo se adueñe de la situación, seremos capaces de amar apasionadamente; y lo haremos porque nos embargará una indescriptible sensación de intemporalidad en todos y cada momento extático y orgásmico, algo que sólo podría concebirse en sueños. Y lo que es más, las delicias derivadas del acto de querer se multiplicarán, puesto que la polaridad no tiene término, sino la posibilidad de añadir mis y más luz.
Hago ingeniería acuática, estudio los delfines y las ballenas…, soy astronauta,
En La bastante difícil vida fácil se recoge desde el testimonio de un travesti, de un actor porno o de un Amo especialista en prácticas BDSM (bondage, dominación/sumisión y sadomasoquismo) hasta el de tres hombres que, en un instante dado de su vida, abandonaron el ejercicio de la prostitución. A muchas personas nos excita el sabernos observadas, sobre todo a las que, como yo, ostentan un carácter histriónico, una suerte de actriz frustrada que desea percibir los aplausos y que con eso recibe satisfacción sexual. Si te expones, hay miles y miles de paginas en internet para mostrarse y demostrarse frente a los usuarios que dejan mensajes candentes, ciertos asimismo exhibicionistas, muestran sus mástiles orgullosos mientras que la pantalla se llena de figuras femeninas goteantes. Otros continuarán voyeristas, testigos presenciales que prefieren pasar inadvertidos o ocultos en el anonimato. Siempre existe el peligro de capturas. Sí, es bien interesante ese planeta, solo para gente muy arriesgada.
En este sentido, lo común es que el hombre se sienta más cómodo con sus fantasías sexuales que la mujer. ¿Por qué razón? Por motivos claramente culturales. La sociedad y la cultura han hecho que la mujer se sienta de forma tradicional culpable por pensar en el sexo y por quererlo. De este modo, no es improbable que la mujer pueda sentirse abochornada e, incluso, temerosa, al pensar en sus fantasías sexuales. No debemos olvidar que no hay que perder la masculinidad para someterse a una Mujer. Hay que doblegarse y despojarse del orgullo y del ego masculino. La buena noticia es que la Mujer Dominante va a ayudar al hombre en ese proceso y que demandará que las actitudes sexistas desaparezcan.
Aun a lo largo de los años infantiles empezaría a hacerse apreciar la zona erógena genital, produciendo, como toda otra zona erógena, una satisfacción ante una estimulación sensible apropiada u originándose de una forma no del todo comprensible, y simultáneamente a la satisfacción proveniente de otras fuentes, una excitación sexual, relacionada en especial con la zona genital. Hemos tenido que lamentar no poder lograr una explicación suficiente de las relaciones entre la satisfacción sexual y la excitación sexual, como entre la actividad de la zona genital y la de las sobrantes fuentes de la sexualidad.
No juzgues y no vas a ser juzgado, no condenes y no serás condenado, disculpa y vas a ser perdonado
Y desde entonces, refiérete a ella como El sentimiento o bien sensación que has llamado Y. La razón es que, si no anclas sus palabras a dicha sensación, al ser tan vagas estas pueden perder a los pocos segundos su significado para ella. Para que los buenos instantes afloren en su cabeza tenemos que buscar la manera de saltar ese cortafuegos, como si el antivirus de un PC se tratase, y ser capaces sugerirle que recuerde aquellos momentos, para ello debemos buscar sensaciones que le recuerden a los momentos que deseamos transmitirle. Para no calificar tan a la ligera a estas nuevas parejas, dedicamos un tiempo a charlar con ellos. Lo que nos dejó más impresionados que al principio, es el valor que tienen para iniciar y terminar un romance, es sorprendente, se han vuelto menos ridículos como ellos lo califican, menos cursis y trasnochados, eso ya no cabe en estos tiempos, nos deseamos nos afirmaron, pero no nos vamos a clavar en una sola persona, habiendo tantas más con los que podemos rehacer una nueva relación y que, con suerte, pueda ser mucho mejor que la anterior.
Cuatro años después de separarnos, el padre de mis hijas me escribió una carta en donde me daba las gracias, finalmente había llegado al punto de ver todo el panorama, y sin rencores, pudo integrar, aceptar y soltar todo lo vivido. Creo que esa es una experiencia que toda mujer divorciada, o que haya terminado una relación de bastante tiempo, merece tener. El saberme valorada y ratificada fue mágico. Las mujeres casi nunca están prestas a tener relaciones sexuales de forma automática y espontánea, como sucede con los hombres. Si solo esperas hasta el momento en que ella sienta deseos de tener sexo, pueden pasar semanas; y en el caso de ciertas damas, pueden pasar algunos meses antes de que ella ‘quiera’ tener sexo. Es por esa razón que debes cautivarla.
GEORGES BATAILLE EL EROTISMO
Es bastante difícil que se resistan a esta vibra tan afectuosa, y sí, te encontrarás a mujeres frías de vez en cuando. No te inquietes. Continúa firme. Cuando suceda esto, tanto como en los saludos, en los abrazos y demás, con mucho tacto, diles, ¡Mas de esta forma no, que se te vea el entusiasmo de verme!, y haces que te abracen o saluden otra vez. En aquellos días en los que estaba empezando, aplicaba una rutina en la que les decía: Dicen que la forma en que abrazas habla mucho sobre tu forma de hacer el amor. ¿Tú que calificación le pondrías a tus abrazos? Funcionaba estupendamente. De ahí puedes bromear poniéndoles un 5 y mostrarles de qué forma se abraza. La capucha del clítoris resguarda el clítoris, y en realidad se mueve, avanzando sobre él y retrayéndose, algo así como el techo de un estadio de fútbol o béisbol, conforme las circunstancias. En general, el clítoris está bien cubierto, mas a medida que aumenta la excitación de una mujer, la capucha se retrae para exponer al pequeño clítoris hambriento a sensaciones más agradables.